Condecorados de la Legión

Serán Laureados de San Fernando:

Capitán Eliseo Godoy Beltrán. Ocupación de la ermita de Santa Bárbara, El Pobo, Teruel, el 12 de mayo de 1938. Póstuma con fecha del 7 de agosto de 1941.

Asalto y toma de las posiciones enemigas avanzando por terreno batido por la artillería enemiga y sin el apoyo de fuerzas propias. Tras llegar con su compañía a las trincheras enemigas, se vieron superados en número por el enemigo, que les sometía a un fuego constante e intenso. Con la finalidad de apoyar y salvar al resto de carros de su unidad, saltó del suyo y empezó a arrojar granadas de mano contra las líneas enemigas, permitiendo la ocupación de las trincheras.

Posteriormente, surgió la necesidad de eliminar una posición enemiga que hostigaba con su fuego el flanco izquierdo.

Al mando de cuatro carros y de una sección de Regulares, inició el ataque. Tres carros quedaron fuera de combate, ya fuese por causa del fuego enemigo o por averías. Eliseo Godoy salió de su carro bajo un intenso fuego para comprobar el estado de los carros, momento en que fue herido, continuando sin embargo en su puesto hasta recibir una segunda herida mortal, a consecuencia de la cual falleció.

 

Cabo Renato Zanardo Cissoto. Por sus acciones en el sector de Olite, frente de Aragón, el 11 de marzo de 1938. Con fecha del 19 de marzo de 1939.

Pese a sufrir la pérdida de la mano derecha por una explosión, dando pruebas de gran valor, siguió dirigiendo su carro de combate, avanzando para auxiliar a otro que se hallaba inmovilizado y rodeado de enemigos. Tras batir la zona con fuego de ametralladoras, dando muestras de una enorme sangre fría y pese al fuerte dolor que le producía la herida, remolcó el carro averiado hasta las líneas propias.

 

Medallas Militares Individuales:

 

Teniente Guillermo Olivares de la Riva.

Voluntario en la Bandera de Carros de Combate de La Legión, participó en combates en los frentes de Madrid y de Vizcaya. Durante la ruptura del Cinturón de Hierro de Bilbao, en el pueblo de Larrabezúa, combatió con varios carros enemigos, a pesar de estar herido y haber recibido su carro un impacto que lo incendió, logrando salvar el vehículo y a su tripulación, y apagar el incendio. Tras hacer los cursillos para ser oficial, regresa a la Agrupación, donde sigue combatiendo con valor y eficacia. El 9 de noviembre de 1938 recibe orden de romper las defensas enemigas en el sector de Venta de Camposines, lo que logrará a pesar del fuego de artillería, sin dejar de disparar con su carro hasta que un impacto directo destruirá su carro, causándole la muerte tras abrir brecha en las líneas enemigas.

 

Alférez Alejandro Corral Arruga.

Al mando de una sección de carros T-26 capturados, integrados en la 3ª Compañía de la Bandera de Carros de La Legión, mantuvo su posición durante el combate por la cota 1597 del frente de Teruel, batiendo durante una hora al enemigo, a pesar del intenso fuego, causando muchas bajas. Consiguió retirarse en perfecto orden tras el fracaso de los ataques enemigos.

 

Alférez Provisional Arsenio Inclán Bravo.

Durante los combates del 28 y 29 de marzo de 1938 en Caspe (Zaragoza) cuando pertenecía a la Bandera de Carros de Combate de La Legión adscrita al Cuerpo de Ejército Marroquí. En unión de su sargento, esperó la llegada de cuatro carros rusos, que apoyaban un contraataque enemigo, atacándoles y dejando fuera de combate a tres de ellos, que fueron capturados. El día 29 encontró la muerte en combate contra varios carros enemigos.

 

Sargento Fidel Rivero Ruiz.

Participa en los combates de Brunete, Teruel y Levante con los carros de La Legión, siempre en vanguardia de su unidad, la 4ª Compañía del 2º Batallón de la Agrupación de Carros de La Legión, integrada en la 82 División. Se cita su actuación el 11 de noviembre de 1938 en la operación realizada para ocupar posiciones situadas al este de la carretera de Camposines a Ascó. Tras haber limpiado algunas trincheras y eliminados puntos fuertes, se ve obligado a detenerse con su carro delante de una de las principales posiciones del enemigo, aguantando estoicamente el intenso fuego enemigo, inclusive una fuerte concentración de artillería. Tras una hora de intenso combate, durante el cual resulto herido en la cabeza, la posición enemiga se rindió. Se negó a ser evacuado, limitándose a una ligera cura de sus heridas, y por la tarde de ese mismo día vuelve con su carro al combate, hace fuego sobre las posiciones enemigas y, en un alarde de valor, obliga a retirarse a varios carros contrarios.

 

Brigada Enrique López Aragón.

Pertenece a la 4ª Compañía del 2º Batallón de la Agrupación de Carros de La Legión. El 11 de noviembre de 1938 tuvo una actuación decisiva en el cruce de la carretera de Camposines a Ascó en la que, con su carro y soportando durante mucho tiempo el fuego, herido, consigue destruir las principales defensas enemigas y es uno de los primeros en asaltar sus líneas. Días después volverá a distinguirse notablemente en la operación llevada a cabo para la ocupación de los principales centros de resistencia en la Sierra de la Fatarella, durante la cual se ve obligado a detenerse delante de las líneas enemigas, con las que sostuvo un intenso y eficaz fuego. En el momento del asalto, es el primero en pisar con su carro las trincheras republicanas, contribuyendo a que se rindiera la posición y logrando salvar el carro tripulado por su capitán, que sufrió una avería a pocos metros de las líneas contrarias.

Cabos Legionarios Manuel Álvarez Álvarez, Manuel García Méndez, Máximo Pérez Pérez, Onofre Calvo Guillem, Félix León Noguera, Alfredo Carracedo Vega.

Destinados a la 1ª Cía. de Carros de Combate de La Legión (5ª División de Navarra) durante el combate por la cota 1597 del frente de Teruel. Tras batir durante una hora al enemigo, que les rodeaba, permanecieron en sus posiciones hasta la caída del sol, momento en que se retiraron tras comprender que el ataque enemigo había fracasado, sin pérdida de material y en perfecto orden. En este combate, los legionarios estaban mandados por el alférez Alejandro Corral Arruga, al mando de una sección de carros T-26 capturados, integrados en la 3ª Compañía de la Bandera de Carros de La Legión.

 

Mención aparte merece el Capitán Daniel Gómez Pérez “Bakali”, oficial al mando de la sección de Transmisiones de la V Bandera de la 2ª Legión al estallar la Guerra Civil. Pide reiteradamente el traslado a las nuevas unidades blindadas que encabezan el avance sobre Madrid (parte de la Columna Madrid). Le es dada autorización, y se incorpora a la 1ª Compañía de la Agrupación del Teniente Castejón, creada alrededor de los Fiat Ansaldo CV 33. Será el primer Legionario en recibir una Medalla Militar Individual a los mandos de un carro de combate por acciones de combate acaecidas el 2 de septiembre de 1936 en Talavera de la Reina (Toledo) donde “al mando de un carro (Fiat-1.1, Compañía), y con valor personal y verdadero espíritu legionario, estuvo durante lo más crudo del combate situándose a la altura de las trincheras enemigas, batiéndolas de flanco y, al mismo tiempo, municionando las primeras líneas de su unidad. Consiguiendo con su labor castigar duramente al enemigo y, por tanto, cooperar de manera muy eficaz al éxito de nuestras tropas para la entrada en dicha ciudad, así como en la limpieza interior del enemigo”. Al ser los hechos posteriores a febrero de 1938 (O.C de 26 de enero de 1937), no se considera dentro de las concedidas al Tercio.

 

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